Nuestro cabello necesita recuperarse después de los largos días estivales. Obtener una óptima hidratación del tallo que aporte fuerza y brillo al cabello es fundamental para recuperar la correcta estructura capilar después de un exceso de agresiones externas.

Factores que alteran la estructura capilar

Sol, mar, químicos en piscinas, ambiente excesivamente seco propio de la época estival… Son agentes externos que afectan a nuestra estructura capilar. Si a ellos unimos cambios como el de la alimentación o el cuidado del cabello mientras estamos de vacaciones, durante las cuales solemos relajar nuestras rutinas, podemos notar cómo afecta a nuestro cabello. De ahí, el temido tijeretazo en septiembre.

 

Para evitar una degradación excesiva es mucho más recomendable mantener una adecuada rutina de cuidado capilar durante todo el verano. En caso de no haber hecho los deberes durante las vacaciones, deberemos prestar más atención a las necesidades de nuestro cuero cabelludo y tallo capilar, con el fin de recuperar su salud cuanto antes.

Tratamientos de recuperación capilar

Tratamiento del cabello dañado

Lavado

Silicona Shampoo (Ref. 37/45) combinado con Hydra Texture Shampoo (Ref. 16/41)

Mascarilla + loción (1 vez por semana)

Dermocapilar Mask (Ref. 28/219) + Molecular Restructor (Ref. 10/10B). Unificar ambos y aplicar la mascarilla durante 20-30 min. Tras el lavado habitual, también se puede aplicar (Ref. 10/10B) directamente sobre el cabello húmedo directamente.

Loción reequilibrante

Molucar Reestructor Amino (Ref. 10/10B)

Loción reestructurante de mantenimiento

Cabellos de seda y acero (Ref. 44)

Añadir en el tinte o la permanente para evitar la irritación del cuero cabelludo y permitir la cohesión molecular del tallo durante el trabajo técnico:

Reatomizante sinérgico (Ref. 63)

Desde Signed By Simone G., os recomendamos varios productos altamente nutritivos que ayudarán a cerrar la cutícula capilar y también os apuntamos un tratamiento reestructurador que permite renovar la estructura de las proteínas del córtex, evitando la malformación de la estructura capilar (encrespamiento, puntas abiertas, sequedad, falta de brillo, rotura del cabello, etc.).