El acondicionador: Indispensable del cabello rizado. El acondicionador aplicar siempre en dirección descendente, mechón a mechón. Además, este es el momento ideal para desenredar el cabello, con los dedos y la suavidad del acondicionador te será mucho más fácil y ni lo romperás, ni lo dañarás.
La mascarilla: Aplicar una buena mascarilla una vez a la semana es vital para todo tipo de cabello, hará que los rizos y ondas están totalmente hidratados y nutridos de la raíz a las puntas. Un cabello hidratado embellece los rizos y los cuida en profundidad.
- Recomendamos: Dermocapilar Mask (Ref. 28/219). Además, con su doble función puedes usarla antes del lavado como peeling capilar y limpiar en profundidad y oxigenar tu cuero cabelludo. Los resultados con ambos usos se notan en la salud del cabello desde la primera semana.
El secado: El primer secado con toalla siempre suave, sin frotar fuerte, respetando la forma natural de tu cabello. Cuando pasemos al secador, recuerda siempre controlar la temperatura para no irritar el cuero cabelludo.
Con el cabello húmedo también podemos aplicar una loción vitamínica para el tallo, ayudando a una mayor hidratación de los rizos.
El peinado: Para peinar el cabello rizado usar siempre peines anchos de púas separadas, para evitar así romper el cabello. Al aplicar una crema de definición de rizos, hay múltiples en el mercado, elegir siempre la más conveniente a tu tipo de cabello y evitar aquellas que sean muy grasosas o que dejen el cabello muy apelmazado. El peinado en seco del cabello rizado puede ser más fácil con un toque de bruma que te ayude a domarlo con tus propias manos.
Para los que prefieren un fijador:
¡Dale vida a tu cabello rizado con estos cuidados!