¡Rizos a tope! Cuidados especiales para el pelo rizado

El cabello rizado tiene mucha personalidad ya que cada cabello tiene su propia estructura. No todos los cabellos rizados son iguales, hay distintos tipos de rizo, del tamaño más pequeño al bucle más ondulante, cada uno con personalidad propia.

La elegancia del rizo reside en su forma definida nacida de forma aleatoria, creando en su unidad distintas densidades y volúmenes.

Todos los cabellos requieren de un cuidado específico para mantenerlo fuerte y sano, en caso de los cabellos rizados existen tratamientos y pequeños gestos diarios que permiten además de tener un cabello fuerte y sano, lucir un rizo definido. 

Tratamiento para cuidar el cabello rizado

  • Lavar el cabello con el agua tibia, no muy caliente. El agua caliente deshidrata el rizo y propicia el encrespamiento. 
  • Aplicar acondicionador hidratante en cada lavado. Una vez hemos lavado el cabello, debemos terminar con el acondicionador para nutrir el tallo, deshacer enredos suavemente con los dedos y aportar brillo al cabello. Recomendamos Triple Action Scalp’s Relaxing (Ref. 130-B). Dejar actuar el acondicionador 3 minutos, después aclarar bien.
  • Aplicar mascarilla nutritiva una vez a la semana. La mascarilla es fundamental para todo tipo de cabello y en el caso de los cabellos rizados es totalmente imprescindible. Con ella aportamos hidratación, sedosidad, brillo y volumen. Nutrimos intensamente todo el tallo capilar y todo ello se refleja en unos rizos definidos, sin encrespamiento. Recomendamos Dermocapilar Mask (Ref. 28/219). Aplicar por todo el cabello después del lavado, tapar con toalla y dejar en exposición de 20 a 30 minutos, después aclarar con abundante agua. Si añadimos a la mascarilla unas gotas de la loción Reestructurador Molecular con Aminoácidos (Ref. 10/10-B), enriqueceremos aún más la mascarilla y aportaremos un gran chute de nutrición a nuestro cabello. También podemos aplicar esta loción directamente con las manos después del lavado, sin aclarado. Prohibido frotar el cabello. Al secar el cabello con la toalla no hacerlo frotando, mejor con ligeros toques con la toalla y enrollar. Así evitamos encrespar el cabello.
  • Peinar con suavidad, sin dar tirones para no romperlo. El cabello rizado tiende a enredarse más, así que es mejor desenredarlo en la ducha, suavemente con los dedos mientras tienes puesto el champú o el acondicionador, mejor con este último.
  • Definir los rizos. Después del lavado, a la hora de peinarnos hacerlo siempre con peine de púas para no deshacer el rizo natural, después podemos utilizar un producto especial para definir los rizos si es necesario. Intentaremos evitar las espumas y geles de poca calidad que apelmazan el rizo y le dan un aspecto acartonado. Mejor aplicar un producto de calidad y si tus rizos ya son definidos debido a su alta nutrición, puedes aplicar un poco de Dermocapilar Mask de medios a puntas.
  • Rizos locos al despertar, ¡controlados! Al despertar los rizos suelen estar un poco revueltos. Para devolverlos a su sitio podemos usar un peine de púas amplias por debajo de la nuca para devolver el volumen y con las manos definir los rizos superiores, para ello recomendamos la bruma especial Cabellos de Seda y Acero (Ref. 44). Se trata de una bruma aplicada en seco que nos ayuda a definir el peinado, además de aportar hidratación a los rizos. 

La clave para tener unos rizos definidos, con libertad de movimiento, sin apelmazamiento ni encrespamiento, está en su correcta hidratación.